Etiqueta: bestia apocalipsis

Mucho se ha dicho y escrito sobre el numero 666. En más de una película se ha hecho alusión a este número y se ha asociado con el poder del anticristo. Algunos han sugerido que este será puesto en un chip más pequeño que un grano de arroz e introducido en la frente o la mano de los individuos en un nuevo orden mundial totalitario. ¿En qué parte de la biblia se encuentra este número tan enigmático y que significa? Estudiemos este tema a la luz de las Escrituras y confirmémoslo en la historia. No vamos a citar todos los pasajes bíblicos, con el fin de hacer nuestro análisis más claro y directo. Te recomendamos buscarlos y leerlos en la biblia directamente. Leamos el libro del apocalipsis el capitulo 13, verso 18:

     “Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis.”

Notemos que el pasaje comienza diciendo que hace falta sabiduría o entendimiento para contar o calcular el número, que es número de hombre. Es decir, de alguna manera hay que descifrar el número de la bestia. ¿Cuál bestia? Sin lugar a dudas, 666 hace referencia a una de las dos  bestias o animales que se describen en Apocalipsis 13. El apóstol Juan escribió lo que vio en visión. Dos bestias extrañas aparecen. La primera sube del mar y la otra de la tierra. En la biblia se representa un poder político con una bestia, eso lo analizaremos más abajo. Otra visión de Juan nos ayuda a identificar a la bestia o poder de Apocalipsis 13 relacionado con el 666. En Apocalipsis 17:1-6. Allí vemos una bestia similar a la primera de Apocalipsis 13, pero con otra característica: Había una prostituta que la cabalgaba. Con ella, dice el pasaje, han fornicado todos los reyes de la tierra. En la biblia, una mujer representa a la iglesia. En Apocalipsis 12 vemos una iglesia (mujer) pura, vestida de la justicia de Cristo. En 2 Corintios 11:2 El apóstol Pablo llama a la iglesia la esposa de Cristo. En la antigüedad, cuando el pueblo se apartaba de Dios esto era descrito como fornicación o adulterio, (ver libro de Oseas). En fin, lo que se le presentó a Juan no fue más que una mezcla entre un poder político, representado por la bestia, y un poder eclesiástico, representado por la mujer. Pero resulta evidente  que ese poder mixto se ha apartado de los principios Divinos, y ha introducido sus propias filosofías, por la tanto se le representa como una ramera. Solo hay en el mundo un poder político-religioso que puede encajar perfectamente con las descripciones que da la biblia: el poder papal romano, El Vaticano. Este es una ciudad estado dentro de la ciudad de Roma, capital de Italia. Aunque es un micro estado, es decir, uno de los países más pequeños del mundo, pues su extensión no pasa de 0.439 km2, con una población de 900 personas, su poder político sobrepasa al de la mayoría de los países del globo terráqueo. No cuenta con un ejército, pero si con su influencia que es mucho más poderosa. Este pequeño, pero poderoso país nació en el 1929 cuando el cardenal Pietro Gasparri en nombre de la Santa Sede y Benito Mussolini, dictador italiano firmaron el tratado de Letrán, que concedía total independencia de Italia a la Santa Sede y reconocía su ciudad como un pequeño estado soberano. Entre otras cosas este acuerdo declaraba que Italia reconocía la religión católica como la única del estado, y comprometía a este país a suministrarle al Vaticano los servicios básicos como transporte, agua, etc. Este tratado también tenía como propósito resolver la “cuestión romana.” De eso hablaremos un poco más adelante.  

Quizás preguntaras: ¿Puede la historia afirmar esta interpretación bíblica de la profecía? ¿Se puede relacionar al papado con la primera bestia de Apocalipsis 13 y con la mujer sobre la bestia en Apocalipsis 17? Si es así, ¿Indicaría esto que el 666 se le aplica al papa? ¿Sería él el anticristo? Nosotros entendemos que la respuesta a todas estas preguntas es sí. Encajemos todas las piezas del rompecabezas para definir cómo llegamos a esta conclusión. A Juan, el revelador, se le dijo que la mujer que montaba la bestia de Apocalipsis 17 estaba vestida de purpura y escarlata, es decir, rojo y morado, dos colores que distinguen al alto clero del Vaticano. También que estaba adornada de de oro, piedras preciosas y perlas. Las reliquias y utensilios del vaticano cumplen estas características. Se le especificó que los reyes de la tierra han fornicado con ella. Hoy día no es difícil ver como todo el mundo acude a Roma para entrevistarse con Francisco, el papa de turno. Pensemos un momento. ¿Por qué los presidentes del mundo acuden a Roma para ver a un hombre que no es político? ¿Por qué la mayoría  de estas reuniones no son públicas? ¿Por qué el papa, un hombre religioso, se involucra en las negociaciones entre países, como los Estados Unidos y Cuba, de forma secreta? Por la sencilla razón que tras el manto de religiosidad, también hay objetivos políticos. Juan, el revelador, dice que vio a la ramera ebria de la sangre de los mártires de Jesús, una característica que la relaciona directamente con la primera bestia de Apocalipsis 13, y eso tambien lo analizaremos más adelante.  Hagamos una lista de las cualidades de la primera bestia del vigésimo tercer capítulo de Apocalipsis (de la cual se dijo era el número 666) para facilitar su estudio y ver el cumplimiento de la profecía en la historia.

1.- Surge del mar. 2.- Tenía un nombre blasfemo. 3.- Parecía un leopardo con pies de oso y boca de león. 4.- El dragón le dio su trono y autoridad. 5.- Una cabeza herida de muerte, pero sanada. 6.- Toda la tierra se maravilló ante la bestia y la adoraron. 7.-Hablaba grandes cosas y blasfemias. 8.- Actuaría por 42 meses. 9.-Haría guerra contra los santos y vencería.

Si el poder  del Vaticano surge del mar, ¿Qué significa esto? En Apocalipsis 17:15 dice que las muchas aguas representan un conglomerado de naciones. Cuando el papado surgió, debió haberlo hecho en el seno del mundo conocido. Vayamos por un momento al libro de Daniel para comprobar cómo la biblia nos dice que una bestia representa un poder político. El profeta Daniel también vio subir del mar cuatro animales o bestias. En este caso, él ve que los vientos combatían sobre el mar, es decir, había contienda y lucha mientras estos poderes surgían. La primera parecía un león, la segunda un oso, la tercera un leopardo, y la cuarta era indescriptible, pero con dientes de hierro, Daniel 7:2-8. ¿Qué representaban estas bestias? A Daniel se le dijo que 1 bestia equivalía a 1 rey, reino o imperio, Daniel 7:17. En visión, Daniel vio el surgimiento de cuatro grandes poderes políticos que existieron en la tierra. Analizando los capítulos 2, 8, y 10 del mismo libro vemos que estos reinos fueron Babilonia, (que fue luego conquistado por) Medo-Persia, (que sucumbió ante) Grecia, (que finalmente fue vencido por) Roma. Cada uno de estos imperios dominó al mundo a base de luchas y guerras continuas. Todos surgieron en el mundo conocido entonces: Oriente Medio, parte de Europa, Asia y el norte de África. La primera bestia de Apocalipsis 13 parecía un leopardo con pies de oso y boca de león, los mismos tres animales que vio Daniel, lo que indica que este poder tendría características similares con estos reinos y estaría relacionado con ellos de alguna manera. También el Apocalipsis afirma que recibiría su trono y su autoridad del dragón, que en la cuarta bestia de Daniel representaba al imperio romano. Entonces el poder papal debió haber surgido después de Babilonia, Medo-Persia, Grecia y Roma. Sin embargo, como dijimos más arriba, el Vaticano solo llegó a ser una nación soberana en el 1929. No obstante, la historia del papado viene de muchísimo más atrás. Veamos parte de la historia del imperio romano.

Este último imperio predicho en la profecía de Daniel 7  no fue conquistado por ningún otro reino sino que se desintegró en varias partes. Uno de los factores que contribuyó con la caída del imperio romano fue la aparición de la religión cristiana. Esta era monoteísta, es decir, un solo Dios, en contraposición con la religión pagana politeísta romana. La religión estaba dividiendo al imperio. Los romanos en principio persiguieron a los cristianos por sus creencias religiosas. El cristianismo era proscrito. Sin embargo en el 313 d. C.  el emperador Constantino cesó las persecuciones y declaró la tolerancia religiosa. El mismo emperador supuestamente se convirtió al cristianismo. El añadió favores en beneficio del clero de la iglesia romana, dio a la iglesia romana un estatus jurídico privilegiado, y multiplicó los centros de culto. En el 318 d. C. comienza a restringir al paganismo, su antigua religión. Muchos paganos, al ver la situación, se convirtieron en cristianos por conveniencia. En el 330 d. C. Constantino dividió estratégicamente el imperio en dos partes: la mitad oeste sería regida desde Roma y la mitad del este lo sería desde Constantinopla, una ciudad que él mismo había edificado en su nombre, (actual Estambul, Turquía). El imperio romano del este llegó a conocerse como el imperio Bizantino. El imperio romano hablaba latín y era católico, mientras que el imperio bizantino hablaba griego y era cristiano ortodoxo. El imperio romano decaía mientras que el imperio bizantino florecía, de hecho este permaneció cientos de años. Más adelante, otro emperador de nombre Juliano, conocido como el apóstata, volvió al paganismo tratando de instaurar su antigua religión. Instituyó sacerdotes por doquier y se atribuyó el titulo pagano Pontifex Maximus o Sumo Pontífice. Pero no logró que el imperio volviera a su antigua religión. Ya para el 381 d. C. el cristianismo era la religión oficial del estado, los herejes habían sido desterrados y el paganismo fue finalmente prohibido. Desde el 483 d. C. hasta el 518 d. C. entre el cristianismo romano y el cristianismo bizantino había habido una disputa sobre la naturaleza humana de Cristo y el emperador Justiniano decretó que la máxima autoridad eclesiástica era la de Roma por encima de la de Bizancio. Esto ofendió a los bizantinos claramente. Durante su vida Justiniano trató de reconciliar ambos bandos del cristianismo, pero no lo logró. En el 533 d. C. él decretó que el obispo de Roma era superior a todos los obispos del imperio y era la cabeza de todas las iglesias cristianas. Y así es como, sin lugar a dudas, la historia confirma que la iglesia de Roma, llámese hoy Santa Sede, (que está dentro del Vaticano) recibió su autoridad del imperio romano como lo indicaba la profecía. Hasta aquí hemos analizado como la primera bestia de Apocalipsis 13 subió del mar y recibió su autoridad del dragón.

Pero hay mucho más que analizar e investigar en la historia para llegar a la conclusión que el papado o Vaticano es la bestia de Apocalipsis 13 que se relaciona con el anticristo y el dichoso 666. Continuaremos en otro artículo con el estudio. Si vamos por partes entendemos mejor. Hasta entonces que Dios te acompañe.